Un inspirador filme realizado por
La iniciativa “Máquinas en un mundo pequeño” (Small World Machines), ofreció un portal de comunicaciones en vivo que unió a extraños de dos naciones divididas por algo más que las fronteras, con la esperanza de producir un pequeño momento de felicidad y promover el entendimiento cultural en todo el mundo.
Jackie Jantos Tulloch, líder de la iniciativa, compara la experiencia de transmisión simultánea en vivo a mirar en una cámara web, cara a cara, con otra persona. "Tus acciones se reflejan literalmente," explica. "Al incluir una pantalla táctil, pudimos ofrecer animaciones interactivas para que las personas pudieran trazar cosas como un corazón o una cara sonriente."
Durante el último año, el equipo a cargo del proyecto superó varios problemas logísticos, de ingeniería, e infraestructura, para lograr hacer realidad la iniciativa “Máquinas en un mundo pequeño.” La experiencia estaba programada para llevarse a cabo en enero, pero una de las máquinas se quedó atascada en el camino, y otros desafíos de seguridad mayores retrasaron la producción del equipo.
"En términos logísticos, tuvimos que coordinar dos oficinas dentro de la red de Leo Burnett y otras tres oficinas dentro de la red de
Después de configurar exitosamente las dos máquinas en marzo - y decorarlas con arreglos florales, colores y otros adornos culturalmente relevantes - el equipo resolvió algunos obstáculos tecnológicos de última hora antes de que las cámaras finalmente rodaran.
"Nos sentíamos como la pequeña máquina que a veces podía y que a veces no", dice Jantos Tulloch.
Los equipos filmaron toda la noche, captando más de 100 interacciones entre personas de todas las edades. Ninguna de las personas que aparecen en la película son actores, y sus reacciones son completamente naturales.
"Las personas de Pakistán y de la India comparten muchas pasiones e intereses - desde alimentos y las películas de Bollywood, hasta la música del Estudio
Creando recuerdos
La película presenta tiernos encuentros, como el de una niña en Delhi que “toca” con sus manos las de una mujer mayor en el lado paquistaní, así como interacciones más animadas, incluyendo un baile improvisado entre dos hombres de aproximadamente 60 años, y que se prolongó durante varios minutos.
"No pudimos lograr que dejaran de hacerlo", dijo Pall. "Y cuando finalmente lo hicieron, ambos estaban sin aliento."
Dilallo dijo que escuchar a las personas compartiendo sus historias hizo la experiencia aún más especial. "Había verdadera alegría y asombro una vez que las máquinas se activaron", dijo. "Ver a un niño correr hasta la máquina y tratar de “chocar” su mano con otra persona fue grandioso. Otra persona se acercó a mí y me dijo que había vivido en la India toda su vida y nunca había "visto dentro de" Pakistán. Fue increíble para él para ver la ropa que llevaban puesta. Es algo tan pequeño que nunca pensarías en ello, sobre todo viniendo de Occidente".
Al final de la grabación de casi 10 horas, ambas audiencias bailaban y decían adiós con la mano a sus nuevos amigos al otro lado de la frontera. Los equipos detrás de las cámaras también se unieron, incluyendo los equipos de
"Fue una grandiosa forma de celebrar lo que considero el punto culminante de mi carrera", dijo Jantos Tulloch. "Trabajar con la marca
La experiencia tocó un acorde especialmente emotivo para los equipos de
"Pero en el fondo, como se muestra en esta película, la humanidad se trata de fraternidad y felicidad."
Más en Journey
- Coca-Cola Ecuador lanza Refresh Packs, un servicio de suscripción mensual
-
La plataforma que
Coca-Cola creó para que sus asociados fortalezcan habilidades digitales -
Chef Virtual
Coca-Cola te enseña a preparar una deliciosa pizza en casa - Un mundo libre de prejuicios y etiquetas ¿Es posible?
- Directorio de restaurantes para pedir domicilio en Managua