Hace poco menos de un mes visité por primera vez el museo de
Aunque han pasado apenas dos años desde que empecé a trabajar en la Compañía
En realidad, el Mundo de
Es imposible no emocionarse al ver el edificio que guarda tanta magia y que es parte de la empresa para la que uno trabaja.
El recorrido.
Desde la bienvenida en el lobby, donde te invitan con una
Estaba muy emocionada de la visita, ya que nos llevaron con el Tour VIP (Opción abierta al público), altamente recomendado ya que los guías conocen todo y te dan mucha más información de la que se expone. Además, todos ellos tienen una increíble energía positiva, y te cuentan cada cosa con la misma emoción de cuando uno le cuenta una historia increíble a un amigo.
Al entrar se pueden ver botellas de
En el primer salón se encuentra una muestra de arte Pop. Aunque es un salón pequeño, todas las paredes y el techo están llenos de anuncios promocionales y artes que son parte de la longeva historia de las marcas. Todos los artículos llaman la atención, desde los pantalones de playa que se cambiaban por cupones hasta un abrelatas gigante. Uno se siente en un parque temático que hace que quedes envuelta en la marca.
Durante el recorrido también se puede ver cómo se preparaba la
¨No recordamos días, recordamos momentos¨.
Como todo parque temático, no se trata solo de artículos o historia, la emoción juega un papel importante. Un claro ejemplo fue cuando nos pasaron a la sala de cine en donde proyectan un video donde se “Celebra la Felicidad”. El corto presenta distintas situaciones muy emotivas en las vidas de las personas. Advertencia, este puede hacerte soltar un par de lágrimas, a más de uno nos sucedió.
El video comienza con una frase de un escritor llamado Cesare Pavese que dice:
¨No recordamos días, recordamos momentos¨. Simplemente me pareció sensacional, porque te hace entender que hay mucho más que
De la misma forma, en esa búsqueda incansable de la fórmula secreta, terminás entendiendo que ella está en cada una de nosotros. Una de las atracciones lo evidencia en una metáfora virtual, donde una queda como en el interior de una vaso que se va llenando de
El oso, un ícono del Mundo de Coca-Cola
Lo que nunca puede faltar ante una visita a la atracción, es la foto con el oso polar que se encuentra en el museo y que como saben, baila de felicidad con los visitantes.
https://www.youtube.com/watch?v=-thDGLnXArE
Nunca creí que fuera a pasarme, pero el mito de estos personajes de la historia de
Un tip: él también está dispuesto a tomarse selfies.
Todas las bebidas del mundo en un mismo lugar.
Más adelante, una sala te invita a probar literalmente todo el mundo de
Pero la emoción no se termina con lo que experimentas o ves en el museo, al final del recorrido hay una tienda para que puedas llevarte parte del mundo
Pero más allá de los presentes y regalos, lo que me llevo a mi casa es la historia, cómo la innovación en mercadeo impulsó a la marca en cada etapa, cómo la hemos disfrutado y vivido en el tiempo las personas.
Quedé feliz de tomarme una foto con el oso polar, sentí que estaba realmente en el mundo de
Vale la pena visitarlo, aún más cuando se tiene una relación con el sistema
Alexandra Rosabal es Nutrition SME en